Ermitas del Rosario y de la Consolación en Badajoz
Es cierto que he paseado multitud de veces por el centro de la capital pacense disfrutando de su riqueza patrimonial y esa mezcolanza tan característica de estilos que posee el casco histórico, pero llevaba mucho tiempo con la deuda de internarme en esa parte más olvidada del Badajoz monumental. Sin duda hay varios ejemplos a los que remitirse, aunque empezaré por uno bastante doloroso con respecto a su abandono, sobre todo teniendo en cuenta que encontramos las ermitas del Rosario y de la Consolación junto a la puerta de carros de la alcazaba, en pleno corazón de Badajoz. Ya lo denunciaba el pasado año la Asociación cívica de Badajoz.
Lo primero que encontramos al acercarnos al conjunto formado por ambas ermitas es un vallado totalmente precario, que teóricamente protege el edificio del vandalismo pero que se encuentra lejos de cumplir su cometido.
La primera de las ermitas es la del Rosario, un edificio de pequeñas dimensiones cuya construcción se remonta al siglo XV. Gracias a algunas fuentes he podido constatar que se trata de una ermita de nave única, pero lo cierto es que no se puede visitar su interior porque todos sus accesos están cegados en la actualidad.


Tiene una historia más que curiosa, ya que acogió a una cofradía conocida como la “Cofradía de los Morenos del Castillo”, formada únicamente por personas de raza negra. El edificio sufrió los estragos de la Guerra de Independencia convirtiéndose en polvorín y destruyéndola en gran parte.
La Ermita del Rosario formaba parte de un conjunto más amplio del que solo queda un pozo anejo y algunas ruinas, como un torreón que alberga un altar y algunos restos de policromía.


En cuanto a la Ermita de la Consolación, la encontramos a escasos metros de la anterior. El edificio se encuentra profundamente deteriorado ya que ha perdido por completo su cubierta.


Su construcción se remonta al siglo XVI, presumiblemente sobre un edificio anterior. Su estructura es también sencilla, de planta rectangular, plagada de nichos y hornacinas policromadas ya que durante el siglo XIX fue utilizada como cementerio local. Como curiosidad, aquí fue sepultado el Capitán General Arco Agüero.
El ladrillo se usa en ambas ermitas como elemento principal de construcción, siguiendo una estructura bastante parecida. También han corrido suerte similar, aunque la de La Consolación se encuentre en un estado de ruina casi total.


La vegetación y el vandalismo se han encargado de acelerar su pésimo estado de conservación, algo increíble dada su importancia histórica y su localización en el centro de la ciudad. Llama la atención como incluso los letreros informativos se encuentran totalmente destrozados.

Os invitamos a conocerlas y visibilizarlas. En breve volveremos a Badajoz para hablar de alguna otra joya escondida entre sus calles.
5 Comentarios
Javi
27/03/2019 at 18:28Preciosas fotos. Gracias.
Arte en Ruinas
27/03/2019 at 18:29Muchísimas gracias!!!
Manuel Rubio
27/03/2019 at 19:29No tenía idea de esas dos ermitas. ¡Una pena!
Saludos
Arte en Ruinas
28/03/2019 at 12:00Hola Manuel! Es curioso, porque están en el centro y yo tampoco tenía noticia de ellas. Un saludo!
Humberto Rivera
24/06/2019 at 19:33Increible el desconocimiento e incultura sobre Extremadura que tenemos